No me molestó lo del general llorando. El flaco venía ya con una depresión a nivel máximo todo el camino de vuelta, y delante de toda la gente le toca decir que no logró una mierda con toda la operación que tenía a su cargo, que básicamente hizo que se muriera el hijo al pedo.
Y lo del brazo no es ridículo tampoco, porque es costumbre devolver los cadáveres a los familiares, y eso es lo único que quedaba.

En cuanto a los gigantes chiquitos, es verdad que se mueven re lentos, pero también esta re claro que venían en modo pastoso, porque no iban ni a pelear ni a cazar, los tenían a todos servidos. No pretendo que se muevan rápido, porque en toda la literatura los gigantes siempre han sido re lentos, pero voy a esperar a verlos en modo serio al menos antes de considerar sus posibilidades de lucha.