O sea, por un lado lo previsible. Se lo quieren limpiar a Mamoru. Ya hubiese sido la causa o consecuencia, desde el momento que se escapó se sabía que le iban a mandar los gatitos. Asumido esto, también era obvio que Saki se iba a encontrar con el problema de saber que es necesario perseguir a los posibles fiends, y al mismo querer proteger a su amigo. Así que tampoco demasiado interesante en esto tampoco.
En realidad los puntos muy altos del episodio son 2. El primero es Satoru tirando la posta, cuando se pregunta por qué carajo persiguen a Mamoru, si no es desobediente ni problemático (y saber la verdad sobre los gatitos por sí sola ya mostró el anterior que no puede ser la causa). Qué conexión hay entre no manejar bien el cantus (o que directamente ni se manifieste) con transformarse en fiend. Esto es lo central acá, y fue genial que Satoru mismo lo dijera.
El otro punto copado que me dejó pensando, es el segundo ataque del gatito. Algo lo ataca y salva a Mamoru. Se me ocurren 3 posibilidades: 1) Mamoru hace "algo" sin querer, lo que podría estar directamente relacionado con la razón por la que lo persiguen; 2) Shun es ahora Dios, lo cual es absolutamente posible; 3) Hay alguien más metido en el medio.