The Drifting Classroom es un manga escrito por Umezu Kazuo, mangaka considerado el "Stephen King" japonés.
Fue serializado en la Weekly Shonen Sunday desde 1972 a 1974, con un total de 11 volúmenes.
En 1987 tuvo una adaptación a película live-action y en 2002 a dorama, ambas bastante libres.



Impresiones
¿Que pasa cuando encontras un manga de 1972 que es un isekai, pero que hace parecer a cualquier isekai de hoy en día un trozo minúsculo de mierda que se te pega al zapato?

Este manga lo había sentido nombrar bastante, siendo un clásico de los mangas de terror, así que aprovechando que estábamos en ese momento entre temporadas donde no hay nada para ver me decidi a leerlo. Aparte me había visto el anime Umezu Kazuo no Noroi y una visita por la peculiar casa del autor.
Y no puedo dejar de mencionar que seguía de cerca lo ocurrido con Arifucaquita, así que leer un manga de varias décadas atrás donde no solo la clase sino toda la fucking escuela era transportada a otro mundo, era inevitable.
 

Lo primero es que el dibujo ha envejecido admirablemente bien. El manejo de las luces y sombras es asombroso. De hecho muy rara vez me puse a pensar que estaba leyendo un manga de los 70s salvo por alguna frase o aparato ocasional. Y una de las razones por las que se mantiene tan bien es que el escenario donde trascurre la acción es bastante atemporal. La escuela, el desierto y no mucho mas.

Por otro lado este es un manga protagonizado casi exclusivamente por niños. Los más grandes tienen a lo sumo 11 o 12 años, como el prota. Hay algunos adultos al principio pero no pasa mucho tiempo antes de que sucumban ante la situación. Y hablando de sucumbir...boy esta cosa es oscura. Mas oscura que un ataud cerrado en el fondo del mar. En los primeros capítulos vemos morir niños pequeños, y no pasa un capitulo sin que alguien muera. Y a veces lo hacen por decenas.

Este manga posee elementos de un clásico de la literatura conocido como El Señor de las Moscas (1954), de William Golding. En ella un grupo de pibes quedan varados en una isla y aunque al principio tratan de mantenerse ordenados, pronto todo desemboca en el caos y la locura.
Lo mismo pasa en este manga. Siempre pasa algo, a veces grande como una enfermedad o cosas que esta expiando desde afuera, o a veces algo pequeño como el pan que alguien se roba, lo cual termina en conflicto y muertes. Aunque en este manga varias veces consiguen reorganizarse y salir adelante de vuelta, comandados por Sho.
Puedo decirles que cada volumen terminaba con un cliffhanger tan grande que no podías dejar de leer el manga aunque quisieras.
También está el elemento del colapso ecológico y las consecuencias del mismo, acercándolo a obras como The Road.
 

Sho es el prota principal, un pibe común que en una situación extraordinaria y desesperante crece de golpe y se transforma en el líder de la escuela, teniendo que enfrentar constantes amenazas del exterior y del interior. No pasa un momento sin que alguien trate de tomar el poder, o se caiga en el panico y la locura.
Sho siempre mantiene el optimismo y la cabeza fría, aunque eso no evita que tenga sus momentos de debilidad. Momentos que lo hacen un personaje muy realista.
Y con todas las cosas que pasa, Sho tiene unos huevos de adamantium.

Junto a Sho hay varios personajes recurrentes como Nishi Ayumi, una chica que tiene problemas para caminar pero posee una habilidad única. Sakiko, una amiga de Sho. Otomo, el pibe atlético y segundo al mando, Yanase el hijo del doctor, Gamo el genio de la escuela y extremadamente leal al prota, Yu el niño de 3 años que fue transportado junto con ellos, etc.
Pero el que para mí es el segundo protagonista clave en esta historia es la madre de Sho. Al principio devastada como el resto de los padres por la desaparición de la escuela, descubre que por alguna razón en ocasiones puede comunicarse con Sho y ayudarlo de alguna manera, llegando a limites increíbles con tal de darle una posibilidad de sobrevivir (como cuando tiene que esconder medicinas adentro de un cuerpo para...), elemento que me recordó a lo que haría años después otro isekai como Garzey´s Wing!
 

Obviamente en un manga como este nadie está a salvo de morir. Llego un momento en que perdí la cuenta de quien había muerto. La historia te atrapa desde el primer momento y no te suelta. Cuando pensas que no puede ponerse más oscuro pasa algo que hace parecer lo anterior un viaje a Disney con todo pago. La comida y el agua se van terminando. Monstruos aparecen, tanto de afuera como de adentro. El mundo donde están es implacable, demente. Hay escenas que vistas hoy y dentro de 30 años serian impactantes, y son tantas que no sabría por dónde empezar.
 

Ahora bien, hay un par de puntos negativos que me la bajaron un poco en los últimos 3 volúmenes.
En los 9 primeros hay un par de defectos aquí y allá, pero como todo el resto del conjunto esta manejado tan magistralmente no llega a molestarte. Pero aun asi quiero mencionarlas, como la subita locura de los adultos.
Después hubo un arco en donde uno de los pibes tiene una habilidad inusual y en un principio queda completamente descolgado. El manga la pilotea porque te siguen tirando la idea de que hay una trama mas grande y que eso va tener sentido mas adelante.
O el hecho de seguir manteniendo a uno de los adultos como antagonista (pedorro), cosa que se podría haber prescindido tranquilamente.
El recurso de la comunicación con la madre de Sho se podría haber usado más veces.


Ahora la joda es que en los últimos 3 volúmenes parece como si el autor le diera a fondo al acelerador y tratara de doblar en una curva, desbarrancando el coche. No sé si fue porque ya tenía pensando darle un cierre y el editor le dijo que la alargara de alguna manera.
Si por ahí tenias una o dos crisis por volumen, de pronto pasan tantas en uno solo que terminas saturado. Nubes asesinas, robots, dinos, rebeliones constantes, caníbales, todo un puto catalogo para elegir. Todo el arco del Monte Fuji me pareció medio cualquiera, aun cuando hubo elementos muy buenos aquí y allá.
Siento que además al autor le agarro el síndrome Lost. Una de las peores cosas es que Otomo, que ya era un personaje medio molesto termina siendo el antagonista casi hasta el final, lo cual lo convirtió en algo similar a tener un grano infectado en el culo.
Encima el final, aunque es bueno, tambien es abrupto y descuidado. La explicación de que causo el salto es cualquiera. Te meten una relación romántica a último momento, y lo peor de todo es que aparece un personaje que lo ves y decís "ESTE QUIEN MIERDA ES?!" y resuelve el tema del último adulto. Feo, amigou.


Resumiendo. Los primeros 9 volúmenes, salvo algún que otro ocasional problema y un arco medio descolgado, geniales. Te atrapan y no te sueltan en ningún momento.
Los últimos 3 volúmenes desbarranca, más o menos a partir del capítulo 35. Final abrupto y tosco, inadecuado para lo que el manga había logrado construir en los primeros 9 volúmenes.

Y con sus problemas y todo es un manga que no puedo dejar de recomendar. Realmente cuando funciona (que lo hace la mayor parte del tiempo), lo hace de una manera extraordinaria e inolvidable, y entiendo perfectamente porque está considerado un clásico del Manga.
Péguenle una leída.