Calificación:
  • 0 voto(s) - 0 Media
  • 1
  • 2
  • 3
  • 4
  • 5
Noche de soledad (novela)
#21
Facundo lloraba emocionado. Lo que tanto le había pedido a Dios, que sus padres volvieran a estar juntos, ahora era realidad. No le importaba que su madre hubiese cambiado de opinión ni que tuviera la mirada perdida. Eso era lo que él quería y punto.
-Hijo, ahora que estamos juntos, te prometo que te voy a llevar al cine todos los fines de semana.
Amanda también estaba feliz… todo era en la casa igual que antes. La señora Claudia y ella compinches en la cocina. Ambas eran muy amigas. Pero… ¿No se iba a ir de viaje a Brasil? Ella se lo había dicho así la semana pasada. Cuando estuvieron solas -el señor se fue a trabajar y Facundo a jugar con su consola de video juegos de última generación- la encaró.
-Señora, ¿está usted bien? La noto rara.
-¿Rara? ¿Yo?
-Disculpe mi insistencia, pero hace una semana me dijo que se iba a vivir a Brasil y que se llevaba al niño con usted.
-Es verdad, eso dije… pero me di cuenta de que mi verdadero amor era Mauricio y no Miguel… él es el padre de mi hijo, si alguna vez estuve enamorada de él, ese sentimiento ha vuelto -dijo arrastrando las palabras y tomando entre sus manos una taza de café caliente- ¿Me entendés no?
Claudia giró en redondo y se sentó.
-Siempre amé a Mauricio, siempre…
-Eso no lo dudo -sentenció Amanda- Tengo una curiosidad… ¿Dónde está su ex novio? ¿Lo abandonó?
-Yo no lo abandone… él me abandonó, él me dejó sola… ¡Voy a ver a mi hijo! -Se puso en pie y fue a la escalera- ¡Amanda! ¡Gracias por preocuparte!
Amanda solo sonrío y no dijo más nada. Ella era feliz mientras su señora lo fuera.

Rafael tenía un don especial. Siempre con su barba candado y esos anteojos de sol que le ayudaban a ocultar el color de sus ojos y su otro problema… Un problema que nadie sabía, excepto sus más cercanos. Su padre también tenía aquel problema. Los ojos del Basilisco eran un problema. Si alguien, fuera quien fuese, le mirara directamente a los ojos durante un minuto… ¡Moriría!
Ahora se dirigía al meollo del asunto. El edificio donde vivía uno de los espías de DIPA. Según su contacto, este se llamaba Maximiliano Guarino. Había sido un ladrón hasta hace poco tiempo. Según sus datos, él vivía en la casa que ahora tenía enfrente. En uno de los pisos, pero no recordaba cual… Toco uno de los timbres al azar.
-¿Sí?
-Disculpe la molestia, ¿Aquí vive el señor Maximiliano Guarino?
-Sí, soy yo…
-Miré, vengo de parte de la agencia –y en voz mas baja agregó- estoy enterado de su misión…
El timbre sonó dentro del edificio, Rafael abrió la puerta y penetró en el cuarto de espera.
Había un pasillo allí, un corredor, con una puerta en uno de sus costados. Esperó para ver si el oficial de DIPA bajaba, pero no lo hizo así que subió él. Una puerta se abrió en el entre piso de arriba y una chica salió.
-Por acá, ¡suba! –Le gritó la chica asomada a la baranda- ¡Venga! ¡Apúrese!
El oficial percibió que algo malo estaba pasando allí arriba. No era un “venga” normal, era un “Venga” de apurarse.
La chica le señalo la habitación que se había abierto delante de él.
-Entre…
El oficial entró.
-Rafael, que bueno verlo, supongo que tendrá una orden de cateo para haber entrado acá…
El oficial había quedado atónito. Era uno de sus superiores quien le hablaba… El oficial Damián González estaba ahí sentado cómodamente en una de las sillas.
-Era un chiste Rafael –bromeó González- podés pasar…
-¡Ey! ¡Se supone que es mi casa! –Bromeó Guarino.
-No olvides quien te da de comer, gatito –lo amonestó el oficial- Nunca muerdas la mano del que te da de comer.
-Sí, sí, sí, ya entendí, voy a buscar café…
Unos instantes después los tres estaban a la mesa bebiendo sus cafés.
-Maxi, ¿Qué has averiguado?
-Bien, este es mi informe… El sujeto a investigar se llama Mauricio Justino Ghomikian, tiene treinta y cinco años, cumple los treinta y seis el nueve de Agosto. Tiene un hijo de nombre Facundo, y es separado. No tuvo novia en un largo tiempo pero… pagó por sexo. Actualmente su ex mujer está conviviendo con un prestigioso Cirujano del hospital ínter zonal de Buenos Aires llamado Miguel Asturias. La mucama de origen Paraguaya ayuda en la casa junto con el chofer. Ella se llama Amanda y él se llama Ricardo.
-Muy bien, averigua más cosas sobre él. Quiero saber que hace él en todo el día.
-¿Por qué a él? –Quiso saber Maxi-
-Es un tipo con antecedentes penales –habló Damián, sacó una carpeta y la abrió- este tipo podría matarlos ahora mismo si quisiera… créanme es peligroso.
-¿y porque no lo detenemos? –Se atrevió a consultar Maxi-
-No es tan fácil. Los policías no podemos entrar a una casa por la fuerza, necesitamos una orden de allanamiento –comentó Rafael-.
-¿Y por qué no ponen micrófonos en la casa?
Todos se dieron vuelta para mirar a quien había dicho esas palabras.
Julieta estaba parada en el umbral de la puerta. Miró a los tres hombres como si se tratara de moscas.
-si se fijan hay espacios en blanco en toda la estructura… desde el primer piso hasta el último-dijo la chica desenrollando un mapa del territorio-
-No se preocupen, es mi estúpida hermana –dijo Maxi casi en una disculpa- ¿en que estas pensando?
-No, déjala… expón tu plan –dijo Damián- yo soy el que dirige este ataque.
-bien, verán, en una de mis incursiones a la azotea y siendo que me gusta filmar… filme esto en mi celular.
La chica puso su celular sobre la mesa y todos pudieron ver a que se refería.
En él se veía a tres personas, uno de ellos era Alvarenga. Los otros dos eran las victimas. Estaban teniendo una conversación.
-Muy pronto hijos será la hora –decía Alvarenga- él despertará. Y juntos, los tres seremos reyes de este insignificante mundo y de los que viven en él –al decir estas palabras cerró con fuerza el puño derecho.
-Sí padre –dijeron ambos al unísono- ¿Cuál es el siguiente objetivo?
-El siguiente objetivo está en la fiesta dentro de dos noches, espero que no se tiren para atrás –dijo Alvarenga- Esa noche será clave.
-Entiendo –dijo uno de los hombres, barbilla cuadrada, bien afeitada y de mirada apacible- será esa noche.
-Y ahí es donde ellos se van –comentó la chica- eso es todo… ahora si me disculpan, tengo cosas que hacer.
Enrolló el mapa y se fue.
-Bien sabemos que hay una fiesta… pero… ¿de que va la fiesta? –Se preguntó Damián- bien investiguen al tipo alto yo voy a la computadora de la seccional, tenemos que detener a este tipo… ¡Ahora o nunca!
{ Este tema ha sido editado, no postees tan rápido, editá }
Rafael decidió hacer una parada. Estaba investigando la desaparición del cadáver de Alejandra Iorii. Fue hasta la morgue y entró por uno de los corredores que se usaban para llevar las emergencias al quirófano. Cruzó la guardia del hospital por dentro y llegó a la morgue.
Allí había un guardia, al ver que alguien se acercaba el tipo se puso rígido en postura militar.
-Javier, ¿ha entrado alguien?
-No, solo estoy yo y el tipo que disecciona a los muertos.
-Javier, abrí…
-Sí, señor.
El tipo transpiraba como loco.
-¿Te pasa algo Javier? Estás transpirando demasiado.
-No, es solo que hace mucho calor –dijo el guardia sacando un pañuelo de tela y secándose la transpiración.
El guardia puso su tarjeta de identificación que lo autorizaba a entrar en aquel lugar.
Lila sintió algo raro al entrar en aquel lugar. Se supone que la morgue esta llena de cadáveres. Pero en todos los nichos donde debería haber gente muerta, estaban abiertos. El forense estaba desmayado allí, en uno de los nichos. Lila llamó al guardia y le informó lo sucedido.
-Busca si lo deseas –le dijo al guardia- pero no encontrarás nada, llegamos tarde… de nuevo.
Lila partió sin destino fijo, como en los viejos tiempos.

Bueno, algunas cosas solucionadas y otras que quedan pendientes. ¿Como terminara esta historia? Faltan solo dos capitulos. Ojala les haya gustado. Me gustaria que comenten -Si es que leyeron hasta aca- Abrazos.





Raziel Saehara
Responder


Mensajes en este tema
Noche de soledad (novela) - por Raziel_Saehara - 07-08-2012, 19:10
Noche de soledad (novela) - por Raziel_Saehara - 07-08-2012, 19:13
Noche de soledad (novela) - por Raziel_Saehara - 07-08-2012, 19:14
Noche de soledad (novela) - por Raziel_Saehara - 07-08-2012, 19:16
Noche de soledad (novela) - por Raziel_Saehara - 13-08-2012, 23:04
Noche de soledad (novela) - por Raziel_Saehara - 13-08-2012, 23:05
Noche de soledad (novela) - por Raziel_Saehara - 13-08-2012, 23:07
Noche de soledad (novela) - por Raziel_Saehara - 20-08-2012, 13:35
Noche de soledad (novela) - por Raziel_Saehara - 20-08-2012, 13:37
Noche de soledad (novela) - por Raziel_Saehara - 20-08-2012, 13:38
Noche de soledad (novela) - por Raziel_Saehara - 26-08-2012, 22:38
Noche de soledad (novela) - por Raziel_Saehara - 26-08-2012, 22:40
Noche de soledad (novela) - por Raziel_Saehara - 26-08-2012, 22:42
Noche de soledad (novela) - por Raziel_Saehara - 02-09-2012, 19:55
Noche de soledad (novela) - por Raziel_Saehara - 02-09-2012, 19:56
Noche de soledad (novela) - por Raziel_Saehara - 02-09-2012, 19:56
Noche de soledad (novela) - por Raziel_Saehara - 09-09-2012, 22:08
Noche de soledad (novela) - por Raziel_Saehara - 09-09-2012, 22:11
Noche de soledad (novela) - por Raziel_Saehara - 16-09-2012, 20:55
Noche de soledad (novela) - por Raziel_Saehara - 16-09-2012, 20:56
Noche de soledad (novela) - por Raziel_Saehara - 16-09-2012, 20:57
Noche de soledad (novela) - por Raziel_Saehara - 26-09-2012, 19:05
Noche de soledad (novela) - por Raziel_Saehara - 26-09-2012, 19:06
Noche de soledad (novela) - por Raziel_Saehara - 30-09-2012, 10:20
Noche de soledad (novela) - por Raziel_Saehara - 30-09-2012, 10:22
Noche de soledad (novela) - por Raziel_Saehara - 30-09-2012, 10:23